Miradas..

....... Ya, dentro de poco habrán pasado cinco meses, desde el día que nuestras miradas se cruzaron, y todo a nuestro alrededor desapareció y nos convertimos en una.

Seguramente sea lo que toda madre diga de su hija o hijo, pero Silvia es la niña de mis ojos, ahora que ya nos hemos hecho la una a la otra, que nos entendemos, ella con sus sonidos y muecas y yo con solo mirarla, todo va como la seda.
Todos los monstruos de antes recogieron las maletas y se marcharon con sus colas entre las patas, aquí no tenían cabida, no les teníamos ningún miedo.
La verdad es que era aterrador pensar que un descuido, por muy tonto que sea, o por no saber como vas actuar o lo que hay que hacer se le pueda dañar a un bebé, ese era mi mayor temor, no estar a la altura. Pero todo ha ido sobre ruedas, la alimentación, los biberones, el baño,los pañales,las cremitas,la ropita...

Ahora ya estamos con la musiquita para estimularla, con los muñequitos didácticos,los besos,los abrazos, el cogerla en brazos, la mochila porta-bebés, el fular, las canciones,los cuentos cortos, y desde siempre con AMOR.

La habitación quedo perfecta antes de su llegada a casa, su padre quito la ventana y la convirtió en una puerta que da acceso al balcón grande, una gran puerta de doble acristalamiento y de color chocolate con gran cristal para que entre mucha luz natural. Su mamádolores y su papáfali (mis padres) le pintaron las paredes de amarillo (muy brillante), y le colocaron pegando con el techo la cenefa* y las cortinas*.
En el cuarto ya había un gran armario de puertas naranjas y una cama nido, con tres grades cajones debajo de las dos camas y una cómoda. La cuna la tragimos de Las Palmas (heredada de mi sobrina Marta) y compramos una bañera cambiador y dos tablas para poner las cositas de Silvia que fuera a necesitar.
También ya había una tabla larga, donde apelotonados he colocado todos mis peluches, que ahora sin duda son de ella.

Y así transcurren los días, poniendo y quitando cositas para que no le falte de nada...ya iré contando..

PD: A los cuatro meses empezo a tomar cereales sin glutem con la leche en el bibe.